35 min
1
2 boniatos grandes
1/2 cucharada de aceite de coco
180 g de filetes de pechuga de pollo sin piel, en trozos
1 cucharadita de jengibre rallado
1 cucharadita de ajo rallado
1 chile rojo, picado (quite las semillas si no le gusta muy picante)
1 cucharada de cilantro, picado
1 cucharada de menta, picada
La corteza y el zumo de media lima
1 rebanada de pan blanco rallado
Sal y pimienta
1 cucharada de yogur griego desnatado
Un bollo grande, cortado por la mitad y tostado
2 hojas de cogollos de lechuga, cortadas con la mano, y más hojas para preparar una ensalada como guarnición
2-3 rodajas de tomate
3-4 lazos de pepino, cortados con un pelador de verduras
1 cucharada de chutney de mango
Para preparar las patatas fritas de boniato, caliente previamente el horno a 200 °C (en los hornos de convección a 180 °C/indicador de gas 6). Corte el boniato grande en forma de patatas fritas y fría con aceite de coco. Sazone con sal y pimienta. Ase las patatas en el horno entre 12 y 25 minutos hasta que estén ligeramente doradas.
Mientras tanto, ponga el pollo con el jengibre, el ajo, el chile, el cilantro, la corteza y el zumo de lima y el pan rallado en un procesador de alimentos. Sazone y ponga en marcha el procesador hasta conseguir una buena mezcla. Caliente previamente la parrilla a fuego medio. Con la mezcla, prepare una hamburguesa grande y colóquela debajo de la parrilla durante 5 o 6 minutos por cada lado, o hasta que quede bien cocinada y ligeramente dorada.
Para servir, unte de yogur la parte inferior del bollo tostado. A continuación, ponga la lechuga, el tomate y los lazos de pepino. Coloque la hamburguesa encima, añada el chutney de mango y coloque la parte superior del bollo tostado. Sirva con las patatas fritas de boniato.